Teniente del castillo de Rocha Forte durante la Gran Guerra Irmandiña. Nombrado en 1455 para ese puesto.
Tras sobrevivir a los asedios de la Hermandad y a la destrucción del castillo, fue herido en la batalla de Altamira, una de las últimas que tuvo lugar en el contexto de las guerrar señoriales de la Galicia bajomedieval, en el año 1471.
El último alcaide de Rocha Forte, que pasó a la historia por su comportamiento heroico en la batalla, falleció en 1489.